Estas palabras, pronunciadas por el empresario Daniel Nogales, propietario del Astillero El Ancla: “Cuando se planta una quilla, comienza un sueño”, resuenan con una profundidad que va más allá de la simple construcción de barcos. Reflejan una visión, una esperanza y un compromiso con el futuro.
Este miércoles, en un evento lleno de emoción y expectativas, se presentaron formalmente tres nuevas embarcaciones construidas íntegramente en Puerto Rawson. Los barcos pesqueros “3 de Abril”, “Lydia D” y “Diego Agustín I” son testimonio de la habilidad, la dedicación y la pasión de una familia históricamente relacionada con la pesca desde 1983.
El presidente de CICECH, César Pailacura, estuvo presente en este momento tan significativo, concurriendo a la amable invitación y compartiendo la alegría y el orgullo de este logro.
La botadura de estos barcos no es solo un hito en la historia de la pesca en nuestra región; es un símbolo de resiliencia, innovación y fe en el futuro. En un momento en que el mundo enfrenta desafíos sin precedentes, estos barcos representan una promesa de prosperidad y un recordatorio de lo que podemos lograr cuando trabajamos juntos con un propósito común.
Con la presencia de funcionarios municipales y autoridades provinciales electas, la ceremonia fue un reflejo de la unidad y la colaboración que caracterizan a nuestra comunidad. Fue un día para celebrar no solo la construcción de barcos sino la construcción de sueños.
En los próximos días, estas embarcaciones serán botadas y se les realizará la prueba de estabilidad en navegación. Pero su verdadero viaje ya ha comenzado. Un viaje que lleva consigo las esperanzas y aspiraciones de toda una comunidad.
En CICECH, nos sentimos honrados de ser parte de este momento histórico y nos unimos en la celebración de este nuevo capítulo en la rica tradición pesquera de nuestra región.
Que estos barcos naveguen con fuerza y gracia, llevando consigo no solo las redes y las capturas del día, sino también los sueños y la determinación de un pueblo que mira hacia el horizonte con esperanza y confianza.
El mar está abierto, y el futuro es brillante. ¡Que comience el sueño!